viernes, 2 de mayo de 2014

LOS CASOS DE MAURICIO ROMERO (MAURICIO ROMERO-ANTONIO SANTOS)

LA NOVELA: Ni Pepe Carvalho, ni Toni Romano. El detective patrio más auténtico se llama Mauricio Romero y, no sé si por suerte o por desgracia, apatrulla la ciudad del crimen. Y es que, como todo españolito de pro, el bueno de Mauricio no dudará en aprovecharse del débil, derrochar en vicios el dinero de sus clientes y criticar a todo hijo de vecino, reflejando/denunciando nuestros usos y costumbres más arcaicos y arraigados. Así, mientras trata de resolver los tres casos que componen este volumen, a cuál más disparatado y esperpéntico, su avezado ojo clínico pasará revista a las calles, monumentos, locales y tugurios más cutrefactos e idiosincrásicos de la ciudad de Cuenca, sin dejar títere con cabeza ni escatimar en sarcasmo y expresiones del terruño, que, a buen seguro, dejarán al lector con una sonrisa en la boca y ganas de más. Si el género negro se jacta de ser el más apropiado para conocer una sociedad, señoras y señores, le pese a quien le pese, aquí tienen la mejor guía turística de Cuenca. (Sergio Vera Valencia, Las Casas Ahorcadas).

EL AUTOR: Antonio Santos Torralba nació en Honrrubia en 1980, pero es conquense por casualidad, porque por aquel entonces sus padres vivían en Santa Coloma de Gramenet (Barcelona), donde residió hasta 1997. Afincado ya en la ciudad del crimen, estudió Humanidades en la Universidad de Castilla–La Mancha, trabajando en lo que podía, ya fuese como becario en la biblioteca, encuestador, albañil, repartidor o piscinero. En la actualidad debería impartir clases de Lengua y Literatura en el instituto de turno, pero es un hombre recortado. 
En lo estrictamente literario, ha hecho camino en el mundo de la poesía, publicando el poemario Del aire y la voz (2005), y sus versos han aparecido en la revista "Saigón" y en las antologías Inmaduros 26, jóvenes poetas de Castilla–La Mancha y Los rostros de Medusa. 20 años de poesía conquense. Su trabajo también ha sido reconocido en los certámenes poéticos Villa de Villamayor de Santiago, Luis Ríus de Tarancón, Alea Iacta est y jóvenes artistas de Castilla–La Mancha. Su reciente novela La ruta de las ratas, protagonizada también por Mauricio Romero, ha sido descrita como "la novela que jamás escribiría un poeta".

LA OPINIÓN DEL BLOG: Los casos de Mauricio Romero, que aparecieron bajo la autoría del propio Mauricio aunque ahora sabemos, tanto por nuestra intuición investigadora como por haber continuado sus aventuras en otro volumen firmado ya por el autor, que está escrito por Antonio Santos, supone la presentación en público de un detective cincuentón, divorciado, ya abuelo, hincha del Real Madrid (no se puede ser perfecto en esta vida) y amante del Carlos I que ejerce sus funciones en Cuenca pese a que por ser una ciudad tan pequeña en la que todos se conocen, no es fácil que un detective pase inadvertido. Aún así, se dedica con entusiasmo, y un punto de cinismo, a su profesión, no desdeñando burlarse, si llega el caso y lo considera justificado, de sus propios clientes.
En este volumen nos narra tres de sus aventuras. En la primera un hombre sospecha que le engaña su mujer, en la segunda una secta quiere que recupere un cáliz sagrado que, al parecer, se encuentra en Cuenca y en la tercera investigará a un conductor kamikaze y al marido de una mujer que también se huele que le ponen los cuernos, con el añadido de que el hombre a investigar pertenece al benemérito cuerpo de la Guardia Civil.
Romero se tomará con cierta cachaza los casos que le encargan, ya que sólo es rápido para tomar el dinero que le ofrecen, pero no para correr a investigarlos. aún así conseguirá desembrollar los diversos líos en los que se va metiendo, pertrechado de sentido del humor, un amplio barniz de cinismo y recurriendo a la violencia si hace falta.

Y mientras leemos sus aventuras y desventuras y, sobre todo, sus correrías por su ciudad natal, de la que es un experto guía, nos damos cuenta de que nos saben a poco y que deseamos leer más aventuras de ese Marlowe manchego. y creo que con esto último ya está todo dicho.

LA MALETA DE MADERA (PABLO ZAPATA LERGA)

LA NOVELA: Bartomeu, un joven payés que vive al lado de la frontera, en la tarde del 27 de enero de 1939 contempla cómo cientos de españoles salen al exilio por el paso de Portbou. Este joven ayuda a cruzar a pie a un grupo que se ha bajado de un coche, ignorando que son los Machado. Recoge una maleta de madera que ha caído de ese coche y, ya en casa, la abre y descubre unos cuadernos que contienen el diario que Antonio Machado ha ido escribiendo de enero de 1936 a enero de 1939, más unas cartas y otros documento. En ellos el poeta va reflexionando sobre las causas de la guerra, situación familiar, la República, el asesinato de clérigos, la cultura, relaciones personales… El 22 de febrero del 39, Bartomeu acude al funeral en Collioure, habla con José, hermano de Antonio, y conoce cómo ha sido la vida de los Machado en Francia en sus últimos días.

EL AUTOR: Pablo Zapata Lerga nace el 30 de diciembre de 1946 en San Martín de Unx, Navarra, un pueblo agrícola situado entre la montaña y la ribera, formando un triángulo casi equidistante con Ujué, Tafalla y Olite. Pueblo afamado por sus vinos, romano y medieval, encumbrado en una ladera, antiguamente amurallado y con castillo defensivo frente al reino de Aragón.
A los once años, primera salida de casa para ir a Miranda de Ebro (Burgos), donde estudia Bachillerato en el Colegio de los Sagrados Corazones. Allí se enfrasca en la lectura de tebeos, junto con las novelas ensoñadoras de Verne, Salgari, Defoe, Stevenson, Melville, Poe, Hoggard, Doyle, decenas de biografías y novelas del oeste. Luego, esa lectura fue ascendiendo para acercarse a los grandes autores de la literatura universal. Terminó bachillerato siendo un empedernido lector, y seguirá así toda su vida.
Estudios en Bilbao, donde cursa Magisterio, Diplomado en Filosofía Y Licenciado en Filología Hispánica
Durante siete años ejerce como profesor de lengua y literatura en Bilbao. Tras un año de profesor en Sevilla (1982-83), retorna a Bilbao, donde desarrollará su docencia en distintos institutos vizcaínos como profesor de Lengua y Literatura Castellanas.
A lo largo de sus años de docencia se ha dedicado, como trabajo extraescolar, a montar bibliotecas escolares y dar cursillos y ponencias. Hizo el Proyecto de Bibliotecas Escolares para el Gobierno Vasco y lo ejecutó durante cinco años montando decenas de bibliotecas. Ha estudiado a fondo la literatura infantil y juvenil.
Es vicepresidente fundador de la Asociación Amigos de Unamuno de Bilbao.

Artículo publicado en el periódico NOTICIAS DE NAVARRA (http://www.noticiasdenavarra.com/) el 1 de mayo de 2014. Redactora: Ana Oliveira Lizarriba.
Es un autor al que siempre ha leído con amor y respeto porque fue un hombre profundo, amante del pueblo, honesto y consecuente, convencido de que la cultura era el medio más importante para cambiar un país atrasado respecto a Europa. Por eso Pablo Zapata (San Martín de Unx, 1946) ha querido rendir homenaje a Antonio Machado en "La maleta de madera", un libro que mezcla novela y ensayo en un intento por colocar a esta figura en el lugar que le corresponde, ya que es patrimonio de todos.
La historia parte de una anécdota. Siempre me he preguntado dónde habría quedado aquella maleta de madera que el poeta sacó de Barcelona y perdió en el camino hacia el exilio francés en Portbou, según el testimonio de su hermano José, cuenta Zapata, que se ha tomado la licencia de contar qué sucedió con aquel objeto. En concreto, en esta novela narra la experiencia ficticia de Bartomeu, un payés que el 27 de enero de 1939 ayuda a cruzar la frontera a un grupo de españoles sin saber que se trata de los Machado. En su trayecto, la familia pierde una valija donde el joven descubre unos diarios que el escritor redactó entre 1936 y 1939. "La maleta de madera" conjuga el relato del protagonista, que con los años acude al funeral del poeta en Francia, con la lectura que va haciendo de esta crónica apócrifa.
El profesor navarro reconoce que también hay otro motivo que le ha llevado a escribir este volumen, y es el desconocimiento y la desinformación que hay sobre la Guerra Civil. Durante el franquismo vendieron sus verdades los vencedores y esas verdades mentidas se han quedado en el inconsciente de un público que no ha leído ni ha tenido la oportunidad de de ir a otras fuentes", lamenta el autor que, más que en la contienda en sí misma, ha preferido centrarse en los cinco años de preparación de esta guerra atroz, para lo que se ha servido de las investigaciones realizadas por expertos extranjeros como Preston, Gibson, Jackson y otros.
Se nota que Zapata está especialmente sensibilizado con el tema de la memoria histórica. Siguen por toda España las placas en las calle y plazas, lápidas en las iglesias ensalzando a los vencedores, mientras que, después de tanto tiempo, se niega el descanso digno y reparador para otros. Y alude especialmente a las decenas y decenas de maestros de la República que fueron enterrados en las cunetas. Ellos representaban la dignidad y la cultura, opina el profesor, que defiende que no puede haber olvido hasta que se conozca la verdad auténtica para todos y haya reparación y justicia para todos.
En ese sentido, y a diferencia de los libros de literatura infantil y juvenil que Zapata ha publicado hasta la fecha, "La maleta de madera" es una novela para adultos con cierto recorrido cultural. Es la visión machadiana de lo que pudo ser y no fue, de ver cómo los ideales de la Institución Libre de Enseñanza, que habían ido fraguando y cambiando la sociedad española fueron erradicados con rabia por los levantiscos. Es el lamento de un sueño que no pudo llegar a su plenitud y creo que abre caminos que muchos desconocen, apunta el autor, que insiste en que Antonio Machado es patrimonio de todos. Pese a todo, en el centenario de su nacimiento (1975), todavía no se habían publicado en España sus obras completas y se prohibieron distintos homenajes a su persona; lo persiguieron porque era un símbolo, lo quisieron reprimir y lo degradaron después de muerto, pero nos quedan sus versos, su palabra, su verdad ética y estética.

Mientras Pablo Zapata escribía estas páginas, fue a visitar la tumba del autor de Campos de Castilla en Colliure. Y me emocionó conocer lo que había sufrido aquel hombre bueno, profundo y sencillo; ver su austera sepultura fue una prueba de lo que nunca tenía que haber ocurrido. Este libro es un compromiso que tenía con don Antonio, termina.